Comando Señoras es un proyecto de creación colectiva dirigido por Alicia Reyero formado por más de 20 mujeres de diferentes edades y ámbitos dentro de las artes escénicas.
Trabajamos en la creación de nuevos referentes femeninos en la ficción y modelos de producción con una perspectiva feminista.
Nuestros tres ámbitos de acción son las cápsulas audiovisuales, las acciones de calle y el espectáculo de sala "Ritos de amor y guerra".
El proyecto Comando Señoras surge como resultado del proceso de creación llevado a cabo durante la formación "Reconstruir la Ficción", donde a través del trabajo creativo reflexionamos sobre la influencia que los medios de comunicación tienen en la construcción de nuestra identidad y la relación con diferentes violencias: vinculadas a la clase social, procedencia, color de piel, orientación sexual, la falta de oportunidades para acceder a lugares de poder y el feminicidio.
CÁPSULAS AUDIOVISUALES
La ficción que generamos y consumimos condiciona nuestra manera de vernos en sociedad. Necesitamos trabajar activamente en la construcción de un nuevo imaginario colectivo para crear nuevos referentes más cercanos a nuestras necesidades y realidades. Modelos en la ficción con los que empatizar. Bajo esta premisa surge la idea de crear las cápsulas audiovisuales virales. Creamos la ficción de un Comando de Señoras organizado, que se nutre de los cuidados pero que también puede ponerse violento en caso de que sus derechos o los de cualquier otra mujer sean vulnerados. Un Comando que da rienda suelta a sus deseos, formado por mujeres de colores.
RITOS DE AMOR Y GUERRA
Ritos de Amor y Guerra es un espectáculo creado a partir de relatos propios con una estructura que está viva. Se transforma en función de las actrices participantes, así como de las circunstancias que nos rodean. Un ritual a tiempo real, donde las actrices y el público participan en un acto común que acaba convirtiéndose en una catarsis colectiva. Un espectáculo multidisciplinar donde la palabra, el movimiento, el ritmo y la imagen se ponen al servicio de historias reales de mujeres de diferentes generaciones, creando un lenguaje propio del Comando. Un lenguaje penetrante, festivo y en ocasiones cómico para poner en manifiesto las diferentes violencias que vivimos las mujeres y como nos han afectado transgeneracionalmente. El impacto y el diálogo social es uno de los motores del colectivo. Nos interesa generar un espacio de reflexión y cohesión intergeneracional. Es por eso que se trata de un espectáculo dirigido a público de todas las edades y condiciones.
En un rincón del imaginario colectivo, reside la Señora por antonomasia.
La que tiene el secreto mejor guardado del caldo de Navidad.
La que te cura el resfriado con una sopa de tomillo.
La que te quita la tanda en el supermercado, controla las mejores ofertas, te cuida, te cocina, te acompaña...
La que calla o la que han acallado.
La construida a partir de una imagen que pocas veces se corresponde a la realidad: la bruja mala, la suegra, la alcahueta, la chismosa, la viuda, la madrastra...
La Señora es la sombra de la cual no sabes nada.
Ahora todas estas “señoras” han decidido apropiarse de su historia y organizarse.
Hay muchas, están por todas partes.
Han salido de aquel rincón y han desplegado su grandeza.
Son un comando. Son bestias. Son brujas. Y están en guerra.
ACCIONES DE CALLE
Conquistar el espacio que nos ha sido negado es el motor que genera nuestras acciones de calle.
Diariamente recibimos noticias de maltratos, violaciones y asesinatos de mujeres en el espacio público.
Mensajes que se van haciendo cada vez mayores en nuestro subconsciente y que impide que nos sintamos totalmente libres en el espacio público.
Con las acciones de calle visibilizamos a unas SEÑORAS fuertes, activas, entrenadas, con conciencia de las violencias vividas pero no por eso con una actitud de víctima.